
Es un orgullo que se halla dedicado este primer monográfico al Parque Nacional de Ordesa y Monte Perdido en exclusivo, lo que además demuestra que los espacios naturales protegidos son un motor de desarrollo de primer orden para la economía local y regional, un foco turístico importante a la vez que constituyen un lugar único para la conservación y la investigación científica de los procesos naturales. Y lo que refuerza nuestra ilusión como aragoneses por mantener la alta calidad natural que atesoran estos valles y montañas.
